El Trece... ¿Es De Mala Suerte?

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  Prólogo                                   Capítulo 11

Capítulo 1                                 Capítulo 12

Capítulo 2                                                   . 

Capítulo 3                                                   . 

Capítulo 4                                                   .    

Capítulo 5                                                   .

Capítulo 6                                                   .

Capítulo 7                                                   .

Capítulo 8                                                   .

Capítulo 9                                                   .

Capítulo 10                                                 .

Hola a tod@s, aquí estoy con un nuevo capítulo, espero que les siga gustando la historia, y el trece no sea de mala suerte para mi XD.

Antes de pasar al capítulo quisiera responder a lo que la mayoría de los comentarios dijeron, y no se preocupen porque Aníbal sí va a tener pareja, desde  que nació este personaje en mi loca cabecita decidí que iba a tener pareja, por desgracia esto no ocurrirá en este libro, en realidad la saga termina precisamente con este personaje. 

Así que si quieren conocer al afortunado, tendrán que seguir al pendiente de la saga q(>o<)p XD.  Ahora sí, pasemos al capítulo de hoy, disfrútenlo q(^o^)p...

CAPÍTULO 13

Daniel miro entrar a sus invitados, en realidad no podía decir que la visita le sorprendiera, no se había olvidado del asunto sobre el interés que Zareb mostraba hacia su pareja, algo que todavía le resultaba muy inquietante.

―Sentimos interrumpirle tan temprano, Alfa Daniel.

―No se preocupe Líder, no es ninguna molestia ―dijo siguiendo el protocolo, aunque tenía recelo hacia esos dos, no podía dejar a un lado el hecho de que estaban en el territorio del otro, por lo que no era sabio provocarles sin saber a qué se estaba enfrentando, no quería iniciar una guerra a menos de que fuera absolutamente necesario―. Tomen asiento por favor, y díganme ¿en qué puedo ayudarles?

―Espero que me disculpe por ser tan directo, pero creo que apreciara que no me ande por las ramas[1], Alfa Daniel ―comenzó Zareb, en cuanto se hubo sentado en el brazo del sillón en que su pareja estaba, a pesar de que había lugar de sobra para sentarse, pues el mueble era de tres plazas―. Lo que hemos venido a tratar involucra directamente a su pareja, así que es conveniente que también él esté presente.

Daniel guardo silencio unos momentos, meditando que debería hacer, no le atraía para nada la idea de tener a su Axel con los otros dos. Tras unos minutos meditando el asunto en su cabeza, tomó una decisión, sólo esperaba no estar equivocándose.

Axel entro a la habitación siendo escoltado, como siempre por Roy y Bram, además del hecho de que ahora Coronel también se unía a la comitiva. Pero estos últimos tres no ingresaron junto con él, sino que se quedaron en la puerta la cual cerraron dándoles privacidad, aunque Axel sabían que estarían escuchando desde afuera para ingresar a intervenir de ser necesario. Al ver quiénes eran sus invitados, él se sintió bastante apenado, recordando que ellos habían presenciado todo lo sucedido el día anterior.

Nervioso comenzó a bajar la cabeza, cuando recordó el consejo de Aníbal, y haciendo verdaderamente un esfuerzo volvió a levantarla, manteniéndola orgullosamente erguida, mientras caminaba al encuentro de su pareja. Una vez que llego al  sillón de dos plazas sentó junto a su compañero, sin ver directamente a los ojos a ninguno de los dos frente a él, para que no fueran a pensar que les estaba desafiando por el dominio, espero pacientemente.

No entendía que hacia allí en primer lugar, si bien era pareja de Daniel, el reclamo aún no se había llevado a cabo, y según sabía por algo que escucho hace tiempo, él no tenía derecho a estar presente en ninguna reunión entre líderes de manada, hasta que la unión fuese completada. Ese pensamiento le hizo recordar el incidente ocurrido, molestándolo nuevamente. Tal vez podría aprovechar esa oportunidad, y cuando la reunión  terminara, solicitaría unos momentos para hablar a con el león, esperando obtener respuestas.

―Lo que tengo que decir es muy importante ―señaló Zareb con solemnidad, inclinándose más hacia su propia pareja, como buscando ánimos para continuar―, realmente me gustaría que nadie más, aparte de nosotros cuatro escuchara esta conversación. ―Dio una mirada rápida hacia la puerta, cuando dijo esto, antes de regresar su vista a ellos―. Pero entiendo que por medidas de seguridad usted no permitirá tal cosa, Alfa Daniel. Sólo quiero saber si confía en ellos plenamente, porque lo que se dirá aquí no deberá divulgarse jamás a otras personas.

―Puede estar tranquilo Zareb, ellos tienen mi plena confianza, no dirán ni una sola palabra.

―Bien ―tomó una profunda respiración, moviendo tras su oreja un rebelde mechón de cabello que parecía empeñado en entorpecer la vista de su dueño―. Para que puedan entender las cosas, deben saber que yo pertenezco al Consejo Superior de Felinos ―sonrió socarronamente cuando vio la sorpresa, controlada en Daniel y la muy evidente en él ante tal revelación, y es que no era para menos―. Sí lo sé, soy muy joven y no es común que un anciano no viva en la sede del consejo, pero eso es una explicación para otra ocasión.

>>El tema que me trae ante ustedes es un asunto del pasado. Hace tiempo hubo un gran incidente, con una colonia de cambiaformas gatos, una de las más grandes que existían en todo el mundo, y que fue llevada casi hasta su exterminio. Cuando nos contactaron ya era demasiado tarde para salvar a la mayoría, lo único que pudimos hacer fue atender a los sobrevivientes, y reasignarlos a otras colonias.

―Una verdadera tragedia para el mundo paranormal, pero, ¿qué tiene que ver todo eso con nosotros?

―Verá Alfa Daniel, cuando interrogamos a los sobrevivientes, acerca del porqué no habían solicitado ayuda antes, todos nos respondieron exactamente lo mismo. Según dijeron, todo se debió a que sobre ellos había caído una terrible maldición, y dudaban que alguien pudiera contrarrestarla para salvarlos.

―Supongo que ustedes no creyeron tal cosa, ¿o sí?

―Ciertamente no, pero la historia, nos llamo fuertemente la atención. ¿Saben por qué? ―preguntó mirando a ambos, y cuando ellos negaron continuó―… porque ellos hablaron de que todo había comenzado, con el nacimiento de un gato negro entre ellos.

El silencio reino durante unos minutos, en los que ambos digerían las palabras dichas. Cuando el significado de esas palabras penetraron en su cerebro, Axel repentinamente sintió que toda la habitación comenzaba a girar, mientras que sudor frío le cubrió por completo al igual que lo hacia el miedo dentro de él, y sin darse cuenta comenzó a hiperventilar. Sólo el calor del fuerte cuerpo de su pareja, que repentinamente le tenía sobre el regazo, evito que vergonzosamente se desmayara.

Sintiéndose arropado en un firme capullo de seguridad, escondió el rostro en el cuello de Daniel inhalando su aroma, para terminar de controlarse. Pero fue incapaz de volver el rostro para ver a Zared y Líder, no sentía que tuviera las fuerzas necesarias para hacerlo. Lo único que le un poco de entereza en esos momentos, era su pareja quien le prodigaba suaves caricias en la espalda, y hacia suaves ruidos tranquilizadores.

―Así es Axel, estoy hablando de tu colonia de nacimiento.

―Él no tiene nada que ver con lo que paso, es sólo problema de ustedes si creen en esas absurdas supersticiones sin fundamentos.

―Tranquilo Alfa Daniel, no es eso lo que quiero dar a entender ―expresó el león en tono tranquilo y conciliador―, sólo estoy repitiendo lo que otros dijeron. Sé que es incomodo para ustedes dos, en especial para Axel por la reacción que ha tenido, pero necesito presentar primero todos los hechos, a fin de que entiendan completamente la situación.

Daniel asintió con renuencia, parecía que aquello era importante. Sin embargo, él no dudaría en acabar la conversación, en cuanto viera que las cosas eran demasiado para su pareja.

―Nos dijeron también lo que había ocurrido desde entonces, y lo que ellos hicieron para liberarse de la maldición, lo que definitivamente no funciono porque las muertes siguieron ocurriendo. Al oír lo sucedido, nos horrorizamos, nunca en toda la historia de los cambiaformas felinos, había ocurrido semejante atrocidad.

Zareb hizo otra pausa, como tratando de mantenerse firme. Daniel se enfocó en Axel, sintiéndole temblar con renovadas fuerzas. Y él estuvo a punto de terminar la reunión, pero las siguientes palabras del león le detuvieron en seco.

―No podíamos creer que hubieran marcado como un paria a un cachorro de tan sólo tres meses y medio de edad, para después arrojarlo a una ciudad humana.

―¡¿Tres mese y medio?! ―murmuró completamente impactado.

―Sí. ―Fue la respuesta, dicha con evidente pesar.

―Axel me dijo que era un cachorro cuando fue desterrado, pero nunca me imagine que fuera tan pequeño. ―Su voz apenas fue un susurro, debido al shock que sentía, pero estaba seguro que los otros le habían escuchado, aunque realmente no le importaba si no lo hicieron, su única preocupación era Axel. Bajó la mirada  para ver la negra cabellera de la cabeza de su pareja, que permanecía enterrada en el hueco de su cuello―. Me sorprende que recuerdes todo lo que paso, a tan temprana edad.

―En realidad no es para nada raro, Alfa Daniel, y debe de saber que estas son algunas de las cosas que deben mantenerse en extremo secreto, porque varios podrían tratar de tomar ventaja de este conocimiento. ―Zareb espero hasta que él asintió para continuar―. A pesar de que los gatos son predadores, son uno de los más pequeños dentro del mundo de los cambiaformas. Por lo que es casi imposible, que en su forma animal, puedan matar a un rival de mayor tamaño. Lo que les convierte en presa fácil, para los demás predadores.

>>Pero la madre naturaleza es sabia, y les ha dado ciertas ventajas que aseguran su supervivencia, como a todos nosotros. En el caso de los cambiaformas de gato, su tasa de natalidad es más alta que la de especies más grandes. Lo que les permite contrarrestar parte de su debilidad con superioridad numérica. Así, a pesar de que como la mayoría de los felinos, los gatos les gusta más ir en solitario, crean colonias para protegerse y sobrevivir.

>>Las colonias a diferencia de las manadas de leones, lobos u otros animales, no tienen Alfas o trabajan en conjunto para cazar o asegurar la supervivencia de los demás. Dentro de estas, cada familia e individuo soltero va por su lado arreglándoselas como puedes, salvo raras ocasiones que ocurren uniones o alianzas entre sus miembros. Pero es sólo hasta que algo resulta ser una amenaza para todos, que todos sus miembros se unen para contrarrestar el peligro. Por ello es que los demás creen que son una manada en toda regla, y esto debe seguir así.

>>Sin embargo, el secreto mejor guardado entre los cambiaformas gato, y que sólo sé  porque pertenezco al consejo, es su inusual desarrollo. Verá Alfa Daniel, a diferencia de otras razas y especies, ellos desde su concepción se encuentran en su forma animal, y se desarrollan con la misma rapidez que un gato común. Por ello, el embarazo solo dura aproximadamente de dos meses a dos meses y medio, aun cuando la madre se encuentre en su forma humana durante todo el proceso. Y después de su nacimiento, ellos permanecen en esta forma sin poder cambiar hasta que alcanzan la suficiente madurez para hacerlo.

―¿Cuánto tiempo tardan para lograrlo? ―preguntó Daniel, sin ser capaz de quedarse con la duda.

― Un año.

―No veo muy práctico eso, un bebé de un año aún es muy indefenso.

―Oh, pero es que cuando cambian no lo hacen a un bebé de un año, Alfa Daniel. Recuerde que dije que su desarrollo se da a la misma velocidad que sus congéneres, los gatos domésticos comunes. Por lo que al cumplir un año de vida, cambian a un joven adulto de dieciocho años de edad.

―¡¿Qué?! ―Al mismo tiempo de que él expresara su asombro, fuera de la puerta se escucho algo de conmoción, sin duda no había sido el único sorprendido por tal información. Pero repentinamente algo angustiante comenzó a formarse en su mente―. Espera un momento, Axel me dijo que tenía veintidós años, ¿eso significa que en realidad sólo tiene cinco años?

Daniel no pudo evitar sentirse un poco como un degenerado, o un pedófilo. Su cuerpo y su mente entraron en conflicto, por una parte quería alejarse de Axel para no sentir que estaba abusando de alguna forma de su pareja, y por otro sólo quería sostenerle más fuerte, para evitar que nada ni nadie volviera a lastimar a su pequeña pareja. Sintió que la cabeza oculta en el hueco de su cuello se movía, pero su cerebro no podía registrar realmente lo que sucedía, o lo que eso significaba, sumergido en su debate interior. Incluso apenas y pudo registrar las palabras de Zareb.

―No, se equivoca de nuevo Alfa Daniel, Axel tiene veintidós años en un cuerpo de un joven adulto de veintiuno aproximadamente.  Y conforme pase el tiempo, la diferencia entre edad y apariencia pronto va a ser mucho mayor. Así cuando su cuerpo envejezca un año más para corresponder a veintidós años, Axel en realidad tendrá veintinueve. ―Zareb dejé que él captara el significado de sus palabras, y cuando al parecer vio en su rostro que lo había hecho continúo― Para que entienda mejor, debe saber que debido a su acelerado crecimiento, todos los cambiaformas gato, tienen la cualidad de que sus mentes y sus cuerpos se desarrollen a la misma velocidad también. Por ellos sus cerebros deben ser capaces de procesar y aprender las cosas a un ritmo acelerado, desde que tienen sólo días de nacidos, una cualidad que conservan durante toda su vida. Esta es la razón por la que Axel recuerda todo lo que pasó siendo tan joven.

>>Pero después del primer cambio, su crecimiento se ralentiza bruscamente a la inversa, así que para que su cuerpo envejezca un año más se necesita que pasen varios años. Esto va por etapa, en la primera etapa son siete años los que deben de transcurrir, después catorce, posterior mente veintiuno, después veintiocho y así sucesivamente. De esta forma sus expectativas de vida son iguales a las de cualquier otro cambiaformas.

>>Aunque debo decirles que no tendría nada de malo que su pareja hubiera nacido hace cinco años, Alfa Daniel. Porque a pesar de que imagino pueda sentirse incomodo, a partir del primer cambio y aunque sólo haya pasado un año desde sus nacimientos, los cambiaformas gatos son en cuerpo y mente hombres y mujeres mayores de edad. Únicamente han necesitado mucho menos tiempo, del que normalmente se requiere para alcanzar la madurez. Pero le reitero, Axel nació hace un poco más de veintidós años. ―Después de reafirmar eso, la mirada del león cambio de verle a él para centrarse en su pareja, dirigiéndose ahora específicamente a Axel. ― Quiero que sepas Axel, que lamento profundamente no haberte encontrado antes.

<<¡¿Qué rayos significa eso, de no haberme encontrado antes?! ¿Porqué me estaría buscando para empezar?>>

Reuniendo todo su coraje, finalmente abandono parcialmente su agradable refugio, girando un poco el rostro para ver al cambiaformas león, con la duda escrita en la expresión de su rostro, pero no hablo, simplemente espero que él otro le entendiera. Después de todo tenía prohibido hablar, y los brazos a su alrededor que le sostenían, y que él no tenía intensión de apartar, le impedían sacar su libreta.

―Como dije, fue un error lo que hicieron contigo, esa no era la forma de proceder. Tu colonia debió recurrir a nosotros cuando todo comenzó a suceder, pero cuando nos llamaron ya había pasado más de un año de que te hubieran desterrado. Se desplego todo una unidad en tu búsqueda, yo personalmente la dirigí, pero no encontramos signos de ti en la ciudad en que te abandonaron, ni en ninguna otra ciudad cercana.

>>Así que temo decirle a los dos, que a pesar de que la búsqueda se detuvo, tú Axel, fuiste etiquetado como cambiaformas de alta peligrosidad para todo el mundo paranormal. Y como miembro del consejo, es mi deber tomarte bajo custodia inmediatamente.

Axel se quedo paralizado sin poder reaccionar, aun cuando el caos se desato a su alrededor. La puerta fue abierta con brusquedad, entrando por ella los tres que la custodiaban. Su pareja, Líder y Zareb estaban tensos al igual que los otros, y todos ellos parecían listos para cambiar y atacar. Él veía todo como si de una película se tratará, no cabía duda que su suerte volvía hacer una inoportuna aparición.

―Sí crees qué voy a permitir semejante locura, estás completamente demente ―dijo Daniel acompañado de un bajo gruñido, que claramente demostraba que no estaba bromeando, y lucharía hasta el final de ser necesario―. No me importa si perteneces al concejo, y atacarte sea un gran delito, tú tocas un solo cabello de mi pareja y yo abriré tu garganta.

―No antes de que yo te destroce ―contraatacó Líder poniéndose frente a Zareb, protegiéndole con su propio cuerpo.

Por lo poco que había visto Axel de Líder, sabía que el Alfa era una persona normalmente tranquila, inclusive no había intervenido nada durante toda la reunión hasta ese momento. Pero ahora él podía sentir claramente, que el cambiaformas perro era sin duda uno grande y fuerte, y aunque no sabía exactamente a qué raza pertenecía porque generalmente se mantenía alejado de los perros, de ninguna manera quería que se enfrentara contra su lobo. No porque no confiara en la fuerza de su pareja, sino porque sabía que éste no iba a salir indemne si ocurría un enfrentamiento entre ambos. Además duda el león permaneciera tranquilo sin entrar a la contienda.

Y enfrentarse contra un león de más de doscientos kilos que tendría a más perros de su lado, los cuales de seguro estaban afuera esperando a la pareja, haría que los superaran en números. Y todo eso en conjunto, era sin duda alguna, una receta segura para la catástrofe. Llegar a esa conclusión fue lo que le hizo reaccionar, sacándolo de su estupor y parálisis para poder prevenir la masacre, que se daría en los dos bandos. Sin perder tiempo se levantó del sillón en que su pareja le había dejado, y se puso delante de Daniel envolviendo sus brazos alrededor de la cintura de éste, en un intento de contenerle.

―¡No lo hagas por favor! ―rogó esperando que su pareja le hiciera caso.

―Axel, no permitiré que te alejen de mí. ―Fue la respuesta que recibió, aunque por fortuna su pareja no intento apartarle, eso quería decir que tal vez tendría alguna oportunidad para hacerle cambiar de opinión.

―Me parece que han entendido las cosas mal, yo no pretendo separar a nadie ―dijo Zareb mientras masajeaba los hombros de su propia pareja, al parecer intentado también tranquilizarle.

―¿Entonces nos encerrara a los dos?

―Tampoco quise decir eso. Únicamente quiero que entiendan, el porqué se estableció ese decreto en primer lugar.

―No veo qué es lo que se supone debemos entender, lo único que comprendo es que quieres lastimar a mi pareja.

―Claro que no, te prometo que nada malo le pasara a Axel. Pero tienes que escucharme hasta el final, por favor.

Axel no confiaba en las tranquilizadoras palabras del león, sin embargo incito a su pareja a regresar al sillón, empujándole insistentemente en esa dirección.

―Habla rápido, mi paciencia se está agotando ―contestó finalmente Daniel sin ninguna ceremonia, sentándose en el sillón sin soltarle, por lo que Axel volvió a quedar sobre el regazo de su lobo, cosa que a él por supuesto no le molesto. Al mismo tiempo la puerta fue cerrada, pero esta vez los otros tres lobos no salieron, en su lugar se acomodaron detrás suyo.

―Existe una regla entre los cambiaformas felinos de todas las razas, y creo que esta también es aplicada en la mayoría de los seres paranormales. Sabemos que hay varias madres que carecen de instintos maternales, consideran a sus crías estorbos y buscan deshacerse de ellos, pero está estrictamente prohibido abandonar a un niño en el mundo humano, sin estar bajo la custodia y supervisión de alguien de su especie. Así que de darse el caso de rechazo hacia sus hijos, la madre debe recurrir al consejo para que nosotros les encontremos un lugar.

>>Usted como Alfa debe de entender el peligro que estaríamos todos, si un cambiaformas sin formación, guía y conocimiento de nuestras leyes, se encuentre entre los humanos. Esa es la razón por la que queríamos encontrar a Axel lo más pronto posible. Y para tener la ayuda de las demás especies, se le catalogo de ser extremamente peligroso, por lo que debía ser remitido inmediatamente a nosotros para su custodia.

―Tienes razón, entiendo el peligro que existe allí. Pero como has dicho, ya han pasado veintidós años, y puedo asegurar que en todo ese tiempo Axel no ha comprometido para nada nuestra existencia. Así que creo que no sea necesario que intervengan más, yo me encargare de él de ahora en adelante, puedo presentarme ante todo el consejo felino si quieres, para solicitar y obtener su custodia de ser necesario.

―Si fueras un felino, ni siquiera les hubieras molestado contándoles todo esto, pero usted es un lobo Alfa Daniel.

―¿Y acaso usted no estás acoplado a un perro?

―Eso es distinto

―¿Por qué?

―Porque yo crecí entre los míos, y conozco todo lo referente a mi raza. Pero Axel no, y eso puedo afirmarlo dado que ustedes aún no se han acoplado.

―A sido mi decisión esperar a que Axel se acostumbre a los cambios, eso es todo, de ninguna manera tiene que ver con lo que él sepa todo, o nada de los cambiaformas gato.

―¿Entonces debo suponer que Axel sabe la manera correcta en que debes reclamarlo? Porque de lo contrario su unión nunca podrá llevarse a cabo, su gato siempre intervendrá en el momento más importante atacándote y huyendo, hasta que se siga el ritual correspondiente.

<<Así que eso fue lo que pasado el día de ayer>>

Axel se sintió aliviado al saber lo que estaba mal con él, y al mismo tiempo se inquieto más porque no sabía de qué ritual estaba hablando Zareb. Siempre trató de recoger la mayor cantidad de información sobre su mundo, para saber lo que podía o no hacer y cómo sobrevivir, pero admitía que le faltaba mucho todavía por saber. Después de todo no era fácil enterarse de cosas, cuando lo más cerca que había estado de un ser paranormal, antes de que chocara literalmente con su pareja, habían sido de por lo menos quince metros fuera de los territorios establecidos.

―Como le dije Alfa Daniel, hay cosas que sólo los felinos sabemos, y dudo que su pareja sepa todo acerca de los suyos ―dijo el león interpretado correctamente su silencio, y antes de continuar Zareb volteó a la izquierda donde estaba la ventana ―. Siendo sincero, debo de reconocer que no obstante a que debo cumplir con mi papel como miembro del consejo, mis razones para buscarte y encontrarte siempre han sido muy distintas a las de mis colegas, Axel.

Zareb regresó su mirada dirigiéndola hacia él, que estaba cada vez más confundido por la actitud y palabras del león, no podía discernir claramente si era amigo o enemigo. Y por el olor de su pareja y miembros de manada, sabía que ellos se sentían de la misma manera, pero ninguno interrumpió.

―Cuando no te encontramos en la ciudad, ni entre alguna de las colonias formadas por gatos parias, ni siquiera una sola mención de que acudieras a las colonias normales o con los gatos solitarios, buscando unirte a ellos. Todos los otros pensaron que habías muerto, pero yo tenía el presentimiento de que no era así, después de todo la resistencia que tu raza posee para sobrevivir, es mayor a la de cualquier otro felino, sin importar que tan jóvenes sean.

>>Sentía que debía haber una razón por la que te habías mantenido alejado, sin mostrarte en lo absoluto. Con lo ocurrido ayer, mis peores sospechas fueron confirmadas. Todo este tiempo has cargado con una culpa que nunca ha sido tuya, pequeño. Tú no eres un gato que atrae la mala suerte debido al color de tu pelaje, nunca lo fuiste y nunca lo serás. Al contrario, creo que tienes una suerte envidiable, Axel.

Él inmediatamente negó moviendo frenéticamente la cabeza. No podía comprender en qué rayos estaba pensando ese león, para hacer semejante afirmación tan ridícula. ¿Cuál buena suerte había tenido él? Nunca le pasaban cosas buenas, y ahora Zareb le decía que envidiaba su suerte. Definitivamente éste estaba completamente loco, ahora sabía que no podían confiar en él.

―¡Axel tranquilízate! Todo está bien. ―Fue el suave susurro de su pareja dicho muy cerca de su oído, y sólo entonces Axel se dio cuenta de que estaba hiperventilando, animado por las palabras de Daniel logro regularizar su respiración―. Eso es, lo estás haciendo muy bien pareja.

―Axel ―siguió diciendo Zareb, cuando vio que se hubo tranquilizado lo suficiente―, el ataque donde murió tu familia no fue el primero ni el último que la colonia sufrió. Como dije era una de las más grandes, por lo tanto tenía muchos acres de tierra que eran codiciados por varios, quienes  constantemente realizaban ataques en un afán de conseguirlos. Tú tuviste suerte de sobrevivir porque quieres atacaron esa ocasión eran también cambiaformas gatos, y estaban matando a todas las crías en un intento minar sus números. Estoy seguro que el color de tu pelaje, logro ocultarte a los ojos de los invasores durante la masacre, dentro del cuarto oscuro[2].

―La plaga s…

―¡Shhh no hables!, recuerda lo que dijo Doc, ¿Dónde está tu bloc? Así tú escribes y yo lo leeré para que los demás oigan. ―Mientras sacaba su pequeña libreta y bolígrafo, el león siguió hablando al parecer entendiendo lo que quiso decir.

―Lo que causo la muerte de la mayoría de la colonia después, no fue ninguna plaga ni enfermedad. Cuando se investigaron esos decesos, se llevaron a cabo varias autopsias y exhumaciones, donde se pudo determinar que la causa de los fallecimientos fue envenenamiento por plata. Después de una exhaustiva búsqueda se descubrió que uno de los pozos estaba contaminado con pequeñas dosis del metal, a causa de un yacimiento de plata cercano a la zona. Según los registros el pozo se comenzó a cavar, tres meses antes de que tú nacieras.

>>Como comprenderás ese incidente tampoco fue culpa tuya, y sobreviviste a este también. Supongo que tu madre adoptiva en cuanto se sintió enferma dejo de amamantarte, por eso no enfermaste como los demás. Y al desterrarte te alejaron de definitivamente del tan letal líquido. Aunque sigo pensando que hacerlo fue inaceptable, tuvieron que llamarnos. Pero ahora creo que eso tenía que pasar, para que lograras encontraras a tu pareja.

―¡¿A qué te refieres?! ―leyó Daniel en voz alta.

―No sé cómo se encontraron y conocieron, pero si lo piensas bien, de haber llegado a nosotros, te hubiéramos acomodado en otra colonia manteniéndote monitoreado para saber que estabas bien. Por lo que tú nunca hubieras abandonado esa colonia, y entonces nunca se habrían encontrado, ¿verdad?

Permaneció callado analizando lo que Zareb le había dicho, ¿acaso era cierto?. Aun había muchas cosas por las que pasaron, que no creían tuvieran tan buenas explicaciones. Varias personas y seres cayendo en desgracias después de haberse cruzado con él por accidente, así como muchas otras malas eventuales que habían ocurrido a su alrededor. ¿Dónde quedaba entonces todo eso?

―Axel ¿recuerdas cuando te dije que siempre hay cosas malas pasando en el mundo, y absolutamente nadie es responsable de ellas? ―preguntó Daniel después de un rato, tomándole de la barbilla para que le mirase. Él asintió recordando la plática que tuvieron no hace tanto―. Eso es todo, no hay porque buscar más explicaciones, tú no eres un gato negro de mala suerte, como te he repetido varias veces, y seguiré habiéndolo hasta que me creas.

>>Recuerdo que mi antiguo mentor me dijo una vez, que la vida siempre tiene dos lados, como las caras de una moneda. Y que muchas veces, por la posición en la que nos encontramos parados observando las cosas que ocurren a nuestro alrededor, sólo somos capaces de ver y centrarnos en un solo lado. Pero siempre debemos de recordar que hay otro lado oculto, que deber ser también tomado en cuenta, o podríamos perdernos en el camino.  

>> Toda tu vida, a causa de tu demente colonia, has permanecido viendo el lado negativo de las cosas que suceden, esperando que más ocurran. Pero ese es solo un lado Axel, hay otro en donde eso malo que pasa, trae consigo cosas buenas. Por ejemplo, muchos creerían que lo que paso antes, con los humanos invadiendo mi antiguo territorio, la disolución de la mayoría de los miembros de la manada a mi cargo, y el verme forzado a mudar al resto entre humanos sin tener espacio para correr, era porque definitivamente yo tenía muy mala suerte.

>>Sin embargo, aunque todavía puedas pensar lo contrario, encontrarte aquella lluviosa noche ha sido lo mejor que me ha pasado nunca, y todo eso malo tuvo que pasar para que ese milagro sucediera. Jamás creí ser tan afortunado para encontrar a mi pareja estando en mi posición de Alfa, porque si para un cambiaformas normal es difícil encontrar a su destinado, para nosotros es aun más complicado, sólo un Alfa entre mil lo logra.

―Eso es cierto Pareja Alfa Axel ―habló Líder, dirigiéndose directamente a él por primera vez―, y por eso siempre te estaré eternamente agradecido. ―El desconcierto se apodero de ellos, y Líder sonrió ante esto, o tal vez fue ante un recuerdo como indicaron sus siguientes palabras―. Zareb y yo nos encontramos, debido a que él te estaba buscando. Llego a la ciudad que yo dirigía en ese entonces, y que fue precisamente donde te habían abandonado. Lamento lo que has tenido que pasar, aunque no puedo lamentar tener a mi Zareb junto a mí. Así que cualquier cosa que llegues a necesitar de mí y de mi manada, ten por seguro que lo tendrás, te doy mi palabra de Alfa.

Axel se sentía demasiado mareado, había mucha información que procesar, otra mucha para creerla. Le tomaría demasiado tiempo llegar a algún acuerdo con varias cosas, incluso tal vez nunca lo hiciera. Era difícil creer toda tu vida en algo, para en segundos dejar de hacerlo. Al parecer únicamente el tiempo lo diría, porque en ese momento no creía poder hacerlo.

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[1] Andarse (o irse) por las ramas es una expresión, que se utiliza cuando una persona trata aspectos poco importantes o que tienen poca relación con un asunto, apartándose de lo más importante o principal.

[2] Se refiera al lugar preparado exclusivamente para tener a las crías, es un comportamiento muy instintivo en los felinos, que las hembras busquen lugares oscuros y tranquilos en los que prácticamente se esconden para parir a sus crías, lo hacen por seguridad, para evitar que personas o animales extraños se les acerquen y les hagan daño. Y debido a que los cambiaformas gatos nacen en su forma animal haciéndolos muy vulnerables, las madres tienen este instinto fuertemente arraigado en ellas. 

Y bien ¿qué les pareció, Zareb es bueno o malo, será solo un plan para hacer bajar la guardia a la pareja, o sus intenciones son nobles?... Bueno, no olviden dejar sus comentarios para hacérmelo saber que creen ustedes, me encanta saber sus opiniones, y me animan a continuar la historia. 

Espero no haber cometido muchos errores en lo que escribí  porque desgraciadamente aun no me siento bien y me cuesta trabajo estar frente a la computadora. Y es que la gripa finalmente me alcanzo ToT, solo faltaba yo, porque a todos los demás en mi familia ya se enfermaron XD. Bueno, por el momento ya me despido, esperen muy pronto más de mis locuras q(^o^)p...